Devolución fianza alquiler: todo lo que debes saber
¿Qué debes saber sobre la fianza del alquiler?
Antes de entrar en una vivienda en alquiler, los futuros inquilinos deben realizar un pago previo equivalente a una o dos mensualidades de la renta, lo que se conoce como fianza.
La fianza cubre posibles desperfectos ocasionados por los inquilinos durante el arrendamiento. Habitualmente, si la vivienda no ha sufrido ninguna anomalía, el importe se devuelve íntegramente al arrendatario. En algunos casos, la operación no es tan simple. Por ello, en Destinocasa desvelamos en este artículo todo lo que debes de saber antes de prestar o recibir una fianza. ¡Sigue leyendo!
¿Cuál es el plazo de devolución de la fianza alquiler?
Una vez acabado el contrato de alquiler, el propietario ya puede devolver el importe de la fianza. A veces es algo normal que la devolución se demore unos días por diversas razones. Para establecer un límite, el artículo 36.4 de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) estipula que: “El saldo de la fianza en metálico que deba ser restituido al arrendatario al final del arriendo, devengará el interés legal, transcurrido un mes desde la entrega de las llaves por el mismo, sin que se hubiere hecho efectiva dicha restitución”.
En otras palabras, el arrendador tiene de plazo un mes desde que le devuelven las llaves para ingresar el importe de la fianza a sus ex inquilinos. En caso de que se demore, la cantidad irá aumentando cada día con intereses. Se entiende que un mes da el suficiente espacio para revisar la vivienda y establecer si se puede devolver el importe íntegro. En el caso de alquiler de locales comerciales, la ley es la misma y el arrendador dispone de un mes para devolver la fianza.
¿En qué casos no se devuelve la fianza?
Existen diversos casos o motivos para no tener que devolver la fianza y que el propietario se quede legalmente con el dinero. Son los siguientes.
- Daños en la vivienda: Sean casos accidentales o no, reparar los daños imprevistos que no figuran en el contrato de alquiler supone un gasto para el propietario. En estas situaciones no se devuelve el dinero de la fianza, ya que se utiliza de forma justificada para arreglar los desperfectos.
- Impagos: Otro motivo suficientemente justificado para no devolver la fianza es si los inquilinos en algún momento han dejado de pagar alguna mensualidad. La fianza puede cubrir los meses de impago siempre que no superen el importe de la fianza. Algunos inquilinos suelen dejar el último mes sin pagar para no tener que recibir el mes de la fianza. Esto no es aconsejable por si más tarde el propietario encuentra desperfectos en su propiedad.
- Realizar obras sin permiso: Existen ciertos límites que los inquilinos deben respetar si quieren recuperar el dinero prestado. Una de ellas son las obras. Los inquilinos no pueden realizar obras sin el consentimiento por escrito del arrendatario, incluso pintar la casa puede suponer un motivo justificado para no devolver la fianza.
- Vivienda sucia: Aunque pueda parecer que este motivo no goza de la misma importancia que los demás, limpiar una vivienda extremadamente sucia también supone un esfuerzo de tiempo y dinero, por ello, es importante devolver las llaves con la vivienda en el mejor estado posible.
- Abandonar la vivienda antes de lo acordado: Según el contrato de alquiler, la fianza no debe devolverse si el inquilino abandona la vivienda antes del fin del contrato. Para abandonar la residencia también se necesita haber pasado al menos seis meses de la entrega de llaves y se deberá avisar con un mes de antelación de la marcha.
¿Qué hacer cuando el arrendador no devuelve la fianza?
Si pasado el mes estipulado por ley, el arrendador no devuelve el dinero de la fianza, será necesaria una investigación sobre el motivo. Para prevenir un posible conflicto, se pueden realizar acciones previas, por si fuera necesario contar con pruebas que respalden el buen hacer del inquilino en el tiempo de arrendamiento.
Por ejemplo, antes de entrar a vivir al piso, es recomendable listar los desperfectos de la casa previos, así como un inventario y el estado de cada cosa. A medida que pase el tiempo, es también aconsejable recopilar los pagos mensuales para poder despejar las acusaciones sobre facturas impagadas.
Con estas prevenciones será más fácil defenderse en caso de entrar en conflicto. Es importante dejar la vivienda lo más perfecta posible para no dar pie a procesos judiciales que pueden quitar tiempo y dinero a ambas partes.
Alquiler seguro con Destinocasa
Como podemos apreciar, la devolución fianza alquiler es un proceso muy corto si no existen grandes problemas, pero que en los peores casos puede alargarse de forma indeterminada. Para que todo salga bien, es importante contar con una inmobiliaria que pueda actuar como intermediario entre ambas partes.
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